3 grandes ventajas de pasarse al vehículo eléctrico

¿Busca una buena razón para pasarse al vehículo eléctrico? Tenemos tres.

Menores costos de funcionamiento

Si se pasa al vehículo eléctrico, ahorrará dinero en combustible y costos de mantenimiento.

Más millas por dólar. Con los vehículos eléctricos se puede llegar mucho más lejos. De hecho, puede ahorrar hasta cientos de dólares o más en costos anuales de combustible.
No necesitan cambios de aceite. Los costos de los cambios de aceite pueden acumularse a lo largo de la vida de un vehículo. Los vehículos eléctricos funcionan con baterías, que no necesitan combustible.
Menos piezas que puedan romperse. Los motores eléctricos tienen muchas menos piezas que los motores de combustión interna. Menos piezas significa menos mantenimiento y menos tiempo en el taller.
Precios estables. Las tarifas eléctricas se mantienen estables a lo largo del tiempo; se acabaron las preocupaciones por el aumento repentino de los costos del combustible.

Los vehículos eléctricos ofrecen una serie de ventajas de rendimiento que pueden mejorar su disfrute de conducción.

Manejo mejorado. Los vehículos eléctricos tienen un centro de gravedad más bajo, lo que mejora la maniobrabilidad y la capacidad de respuesta.
Funcionamiento más silencioso. Los vehículos eléctricos producen menos ruido de propulsión que sus homólogos con motores de combustión interna.
Mayor aceleración. Los motores eléctricos generan un par instantáneo, lo que significa que los vehículos eléctricos proporcionan una aceleración más rápida y suave.
Frenado regenerativo. Al pisar el freno, muchos vehículos eléctricos generan electricidad, que se almacena en la batería y ayuda al vehículo a ponerse en marcha de nuevo.

Los vehículos eléctricos no solo son más baratos y fáciles de manejar, sino también más respetuosos con el medio ambiente.

Sin emisiones del tubo de escape. Los vehículos eléctricos no emiten gases de escape, por lo que son mejores para la calidad del aire de su comunidad y para el planeta.
Menos contaminación. Incluso cuando funcionan con electricidad procedente de centrales térmicas de carbón, los vehículos eléctricos reducen las emisiones totales de gases de efecto invernadero en un 20 % como mínimo en comparación con los vehículos de gasolina. Los vehículos eléctricos parecen aún mejores si se tiene en cuenta la creciente cantidad de electricidad producida a partir de fuentes limpias y renovables.
Mayor eficiencia energética. Los vehículos eléctricos convierten más del 77 % de la energía eléctrica de la red en energía en las ruedas. Los vehículos de gasolina convencionales solo convierten entre el 12 % y el 30 % de la energía almacenada en la gasolina en potencia para las ruedas.

Con sus numerosas ventajas, los vehículos eléctricos ofrecen un camino claro hacia un futuro mejor para todos.